Uruguay cayó 3-0 con Argentina en el Monumental, en un partido que tras la apertura fue un martirio y que los hinchas albicelestes disfrutaron al grito de “ole, ole”.

El partido comenzó con los locales adueñándose de la pelota y los celestes esperando en su mitad de cancha, sin salir a presionar y cediendo la iniciativa.

El partido era de ida y vuelta, con poco peaje en zona de volantes y Suárez sin poder “afinar el taco” para guardarla en el “trampero”. Así volvió a pasar a los 29′ tras otro gran centro de Viña para el “Pistolero” cuyo intento se estrelló en el palo, y luego De la Cruz no pudo disparar con fuerza. 

El tanto que quebró la paridad llegó de la manera más insólita posible, con un centro sin demasiadas pretensiones de Messi, que Nicolás González no llegó a conectar y Fernando Muslera con una flojísima reacción, soprendido y quedando con las mano vacías, no pudo sacar y se metió mansa por su palo derecho. 

Este fallo del guardameta hizo que todo el equipo quedara sumamante nervioso, con el escore en contra y presto a recibir el segundo que no demoró en llegar.

Los celestes padecían el partido, con Messi jugando absolutamente liberado para volver loca a toda la defensa y llegando una y otra vez por la banda izquierda donde sacaron réditos durante todo el cotejo.

Argentina celebró el 3-0 con que se fue el cotejo, justificada diferencia por lo visto en cancha y que gracias a los otros resulatdos de la jornada no pesó tanto en la tabla donde Uruguay se mantuvo cuarto con 16 unidades pero ahora con saldo 0. Y no olvidarse que viene Brasil de visita el jueves.